En este blog se podra encontrar todo lo relacionado acerca de la vida que viven los jovenes en la calle, sitios no aptos para ellos en los cuales definitivamente no aprenden nada bueno y los lleva a causarce mucho daño a ellos mismos y a todos los que los rodean.



domingo, 18 de marzo de 2012

RUMBA SIN CÉDULA

Una prueba de que existe negligencia de los padres y poco interés por la integridad de los niños , es el reportaje que publico el diario " el tiempo" que puso en evidencia el auge de fiestas para menores de edad conocidas comercialmente como "reggeton party", "chiquitecas" o "minitecas". Este tipo de "fiestas" son organizadas en discotecas, bares, tabernas y hasta en nigth club, en horas de la tarde y/o durante los fines de semana. Estos establecimientos son arrendados a empresarios para realizar esas "fiestas" o los mismos dueños de los negocios las promueven y organizan.
La organización de ese tipo de "fiestas", es un fenómeno que ha venido creciendo en la ciudad , a las que asisten niños menores de 14 años. En algunos casos asisten niños desde los cuatro años a este tipo de eventos, solos o en compañía en algunas ocasiones por sus padres.
Según la sicologa de familia, María Elena López, citada como fuente en el reportaje señalado, los niñ@s menores de 12 años no son autocontroladores, lo que significa que situaciones de "rumba" como las que se presentan en esas "fiestas", los aproxima tempranamente al mundo de los adolescentes y al de los adultos, situación que no pueden manejar ni entender. Estas situaciones generan, que las etapas normales del ciclo vital de desarrollo de los niños se alteren, exponiendo a esta población a un riesgo latente de confusión, indefensión y manipulación por parte de los niños mayores, de los adolescentes y los adultos presentes en los eventos.
Un elemento adicional y que debe poner en alerta a la familia y a las entidades responsables de la protección de los derechos de los niñ@s, es que a estas "fiestas" es admitida la asistencia de adolescentes y adultos quienes participan en ellas junto a los niñ@s. Son por lo menos preocupantes las explicaciones que resulten, para entender cuáles son las motivaciones de los adultos que asisten a estas "fiestas", donde la mayor cantidad de asistentes son niños y menores de edad.

RUMBA SIN CÉDULA



Es esta la realidad que están viviendo los jóvenes entre los 12 y 17 años,quienes como podemos observar en las imágenes anteriores específicamente en las mujeres como tal; se ve reflejado el poco respeto y el mínimo valor que le dan a su cuerpo.

ES ESTA LA SOCIEDAD DE CONSUMISMO QUE QUEREMOS PARA NUESTRA FUTURA GENERACIÓN?

Tomemos conciencia acerca de los actos que observamos en nuestro diario vivir valorémonos como personas, autónomas y responsables de nuestros actos.

jueves, 15 de marzo de 2012

INFLUYENTE EN EL MAL RUMBO DE LOS JOVENES

El alcoholismo entre los jóvenes!

Numerosos estudios sobre hábitos de los jóvenes dan cuenta de un incremento en el consumo de alcohol y uno reciente, realizado por la consultora privada revela la facilidad que tienen para acceder al mismo.El acoholismo juvenil es creciente en el país y en otras latitudes y en todas las franjas sociales. El consumo excesivo de alcohol puede ser episódico y transitorio, como parte de prácticas grupales y de búsqueda de nuevas sensaciones, fenómenos comunes en la adolescencia y la juventud. Pero cuando es excesivo o se instala como hábito, se convierte en un problema sanitario, educativo y social grave.Si bien, como medida precautoria, la venta de alcohol a los menores está prohibida, una encuesta realizada por la consultora Programar Proyectos Educativos, entre 5000 chicos de entre 13 y 19 años de clase media y media alta de la Ciudad y el Conurbano, que admiten consumir alcohol, la mitad de ellos afirman que conseguirlo es fácil y que lo hacen en quioscos, supermercados o almacenes.La accesibilidad al alcohol es síntoma del incumplimiento de las normas por parte de los comerciantes y de la debilidad o ausencia de controles estatales. Pero el alcoholismo, como otros problemas que experimenta la juventud, es consecuencia, en primera instancia, de la falta de presencia de la familia en la formación personal de los jóvenes. Los padres y las escuelas deben ser los principales encargados de hacer frente a este tipo de urgencias en la vida de los menores. Un estudio detectó que para los jóvenes conseguir alcohol es muy fácil. El alcoholismo juvenil puede ser grave y tratarlo es, en primera instancia, responsabilidad de las familias.

CASOS DE LA VIDA REAL!

ADOLESCENTES EN RIESGO

Violencia por nada: Qué hay detrás de las nuevas peleas juveniles

Son chicos de entre 14 y 20 años, buen nivel educativo y sin apuros económicos. Pero cuando salen a bailar pueden terminar matándose a golpes. La falta de límites, la sensación de impunidad y el exceso de alcohol, factores clave.
Ella tiene sólo 17 años, pero la astucia de un adulto típicamente argentino: "¿Ves?, tengo dos cédulas de mis amigas y tres registros de conducir, truchos, obvio. Con esto entro a cualquier boliche y nadie puede negarme bebidas alcohólicas". Son las 3.15 de la madrugada y la luna llena apuñala el Río de la Plata. Para ella y sus tres amigas de San Fernando y San Isidro recién empieza una noche que terminará cuando asome el día, quién sabe cómo.La muerte de Matías Bragagnolo luego de una pelea de chicos, hace una semana, las hace mirar un contexto de agresividad que perciben como natural: "Hay chicos que se entrenan toda la semana en el gimnasio para pelearse los sábados. La mayoría son tranquilos, pero a veces hay grupos que les gusta cagarse a piñas", dice Naty, una flaquita extravertida que ya cumplió los
18. "En el Club San Fernando, por ejemplo, los chicos del rugby siempre enfrentan a los skinheads. A veces está bueno: un día pudimos entrar a un boliche gracias al tumulto que se armó en la puerta, donde nos habían rebotado minutos antes".Más de 40 testimonios recogidos de madrugada por tres periodistas de Clarín, en boliches y bares de Costanera Norte, Recoleta, Los Arcos, Las Cañitas y Pilar, aceptaron que asoma un nuevo problema juvenil, la violencia sin motivos aparentes, casi incomprensible, incentivada por el consumo de alcohol, bebidas energizantes y drogas, y alentado por un esquema de diversión que parece concebido para que el descontrol no tenga responsables. Por supuesto, esto no ocurre todos los sábados ni describe a todos los chicos de mejores recursos. Pero la fortuna de que aún no sea un fenómeno masivo no disminuye la inquietud ante semejantes hechos."Cerca de un 80 por ciento de los jóvenes de entre 16 y 18 años resuelve sus conflictos a las trompadas. Muchos terminan con lesiones, y en algunos casos hasta con denuncias policiales. En la última década, la citación de padres a los colegios por enfrentamientos físicos de sus hijos aumentó un 60 por ciento", señala el psicoanalista Fernando Osorio, autor del libro "Violencia en las escuelas". Sin embargo, la profesora de Derecho Penal Juvenil de la UBA Mary Beloff subraya que "la criminalidad juvenil no está medida en la Argentina por métodos científicos serios, por lo que cualquier conclusión puede ser temeraria y se referirá, en todo caso, a percepciones".Estadísticas parciales ofrecen pistas para entender por qué se repiten los casos de violencia entre jóvenes que, en apariencia, no tienen justificaciones sociales (pobreza, falta de educación, desempleo paterno). Entre 2001 y 2003, el 3 por ciento de las causas penales instruidas en los juzgados porteños tuvieron como imputados a jóvenes menores de 18 años. De ellas, 48 por ciento pertenecía a hogares de bajos recursos y el 52 por ciento, a chicos de clase media y alta. A su vez, un relevamiento realizado el año pasado por la Facultad de Derecho de la UBA junto con UNESCO entre 1.800 profesionales de la educación, reveló que ocho de cada diez asumían no estar formados para manejar situaciones de violencia. Entre ellos, el 75 por ciento trabajaba en colegios privados que asisten a una población de clase media y alta.En la segunda valla de control de ingreso del boliche Mint, entre el Aeroparque y el río, jóvenes musculosos empujan y gritan para tratar de entrar gratis. No lo consiguen y empiezan a "meterse púa" entre sí:—El patovica dijo que no vas a entrar porque sos un negro de mierda. Si insistís, te va a sacar del forro del culo.—¿Cuál? ¿Cuál?, decime quién es que lo mato.—Te va a matar él a vos, enano.Repetirán escenas parecidas hasta las cuatro de la mañana. Los patovicas.
         JOVENES NO REPITAMOS ESTAS HISTORIAS REFLEXIONEMOS Y DIVIRTAMONOS SANAMENTE!